El descanso hambriento
Imagínate que te encuentras manejando en la ruta. Ya
es de noche y después de varias horas de viaje decides que es momento de
descansar. A lo lejos ves un cartel que dice que hay un hotel a unos pocos
kilómetros de donde estas, asiques decides dirigirte hacia ahí.
Al llegar al hotel, te das cuenta de que no era lo
que imaginabas, el lugar parecía una casa antigua, bastante descuidada, pero como
estas tan cansado del viaje, no te puedes quejar.
En la recepción te recibe un hombre con la piel más
pálida que has visto en tu vida. Utiliza unas gafas oscuras y notas que cuando
te habla no te mira directamente a los ojos, por lo que asumes de qué se trata
de un hombre ciego. Una vez que te registras, decides ir a tu habitación para
finalmente descansar. Primero decides tomar un baño para luego sentarte en el
sillón y seguir leyendo tu libro de cuentos en croata, pero cuando te acuestas
para dormir, empiezas a escuchar unos sonidos extraños provenientes de afuera.
Cuando miras hacia tu puerta, notas como unas sombras pasan por delante de ahí
como si algo o alguien estuviesen esperando por ti del otro lado.
Cuando despiertas, al otro día, encuentras que la
puerta de tú habitación estaba abierta y la ventana completamente rota. Además,
había un mensaje en la pared pero no lo llegas a distinguir del todo, ya que
solo puedes ver jeroglíficos.
No comprendes que fue lo que pasó aquella noche,
pero sabias que debías escapar de aquel lugar antes que sea demasiado tarde. En
ese momento tocan suavemente tu puerta y entra el ama de llaves para limpiar tu
habitación. La mujer parecía de unos 70 años, y tenía en su brazo izquierdo un
tatuaje extraño que lograste distinguir
en segundos, eran más jeroglíficos. La mujer, al ver el estado de tu
habitación, te mira con preocupación y te dice que debes irte de inmediato,
porque si no esta noche te convertirías en la cena. Sin pensarlo demasiado,
agarras tus cosas, y sin mirar atrás escapas de ese extraño lugar.
Comentarios
Publicar un comentario